Hace años el hotel ofrecía cafés y tés en las habitaciones, pero ahora no hay nada. increíble, ¿verdad? además, la música alta de las limpiadoras a las 9 de la mañana es lo último que necesitas en vacaciones. casi pensé en dejar una buena reseña, pero no pude, sinceramente.

La atención que sorprende

Desperté con el aroma de croissants recién horneados. La atención del personal fue excepcional, especialmente la de Alberto Junior, quien hizo que nuestra estadía fuera memorable. La ubicación era perfecta, cerca de todo.

El hotel es complicado de encontrar y el aparcamiento es un verdadero desafío. La habitación era un poco pequeña y no obtuvimos las dos camas que solicitamos, pero como éramos amigos, lo manejamos bien.

El acceso al mirador fue perfecto.

La habitación tenía un balcón muy útil para disfrutar del aire fresco y relajarse después de un día explorando. El desayuno, aunque un poco básico, ofrecía la opción de buffet, lo cual siempre es un plus.

A pesar de que la ubicación era ventajosa, al estar ubicada a pie de calle, la habitación se sentía ruidosa debido al tráfico y los turistas que pasaban. El baño necesitaba mejoras, ya que el inodoro tenía problemas y el olor en la ducha no era agradable, lo que afectó un poco la experiencia general. La limpieza del suelo, de tipo linóleo, no parecía muy confiable, y noté que faltaban chanclas en la habitación, lo que podría ser un inconveniente para algunos. También, la escasa variedad en el desayuno no cumplió con mis expectativas tras haberlo pagado.

La ubicación es espectacular, cerca de atracciones históricas.

Fue absolutamente frustrante encontrar el hotel, está en callejuelas estrechas y parece que no hay un lugar adecuado para descargar las maletas. Además, el estacionamiento es una pesadilla, tuvimos que pagar 50€ en un aparcamiento lejano. Y la 'vista al mar' era solo una ilusión, como si te estuvieran tomando el pelo porque realmente solo veías el edificio de enfrente.

excelente acceso a la playa y atracciones cercanas

Mi estancia fue maravillosa, con fácil acceso a Playa de Levante, a solo un poco más de un kilómetro, lo que me permitió disfrutar de caminatas matutinas junto al mar. además, el Parque Elche está a solo 0.3 km, una opción perfecta para un paseo relajante tras un día explorando la ciudad.

la ubicación era excelente para disfrutar del casco antiguo, pero el ruido era molesto.

Disfruté de una buena ubicación cerca de la playa y también encontré un buen lugar para comer croissants por las mañanas. Me gustó el trato del personal, siempre amable y dispuesto a ayudar. Aunque fue complicado encontrar el hotel, la cercanía con los bares y restaurantes hizo que valiera la pena.

Tuve problemas con la limpieza de la habitación y el ruido del pasillo. la insonorización no fue buena, se escuchaba a los huéspedes vecinos.

La ubicación del hotel es impresionante, justo al lado del mirador, lo que facilita el acceso a varios bares y restaurantes. La limpieza de las habitaciones fue excelente, siempre olían muy bien. Sin embargo, la insonorización deja mucho que desear. Se escuchaba todo lo que pasaba en los pasillos y las habitaciones cercanas. Definitivamente me molestó el ruido, sobre todo cuando los vecinos regresaban de madrugada. Otro detalle a mejorar es que el check-in es un poco tardío, a partir de las 16:00. Aunque el personal fue amable y siempre dispuesto a ayudar, sería ideal que la habitación estuviera lista antes. Por otro lado, el baño tiene una cristalera que no ofrece mucha privacidad y eso puede ser incómodo. En general, la combinación de la ubicación y la limpieza del hotel es lo que más me gustó, mientras que el ruido y el tema del check-in tardío son puntos a mejorar.

La habitación era cómoda, con decoraciones modernas y bien mantenidas. Tenía un TV inteligente que me dejó ver mis series y películas, lo cual fue genial. El baño tenía una cristalera que no me daba mucha privacidad, pero la ducha tenía buena presión. Fue tranquilo, sin ruidos molestos que me interrumpieran el sueño, lo cual se agradece. Las camas estaban bien, dormí de un tirón. El aire acondicionado funcionó a la perfección, ideal para los días calurosos. Pintó muy bien.

Fue una opción perfecta para un viaje relámpago a Benidorm con una buena calidad por el dinero pagado. La habitación tenía un balcón que fue genial para tomar el aire y relajarse un rato. Sería bueno llegar con tiempo ya que el check in es un poco tarde.

La ubicación es perfecta, justo al lado del mirador y cerca de bares. Las habitaciones son modernas y siempre están limpias. El desayuno es completo y fresco, y el trato del personal es excepcional.

Ha superado mis expectativas.

La ubicación cerca del mirador y los bares locales hizo que mis caminatas por la mañana fuesen perfectas. ¡No olvidaré la atención del personal, siempre dispuestos a ayudar!

Recomiendo este hotel, es total para un viaje fugaz,

Hermosa habitación, excelente desayuno, la ubicación era perfecta para acceder fácilmente al transporte público a solo 20 minutos caminando.

Todo ha sido magnífico

La habitación, con su balcón, era como tener un palco VIP para disfrutar del espectáculo que es Benidorm. El desayuno buffet era un festín donde los croissants parecían recién salidos de una película de cocina—crujientes, dorados y con un aroma que te levantaba más que un espresso. La ubicación cerca del mirador convirtió mis paseos en aventuras, ¡casi como estar en un tour de fantasía!

Ruido excesivo